1.- ¿Qué es la Gestación subrogada?
En muy resumidas cuentas, la gestación subrogada o gestación por sustitución, –mal llamada maternidad subrogada, maternidad suplente, vientre de alquiler o vientre sustituto-, es simplemente una técnica de reproducción asistida por la que una mujer accede a gestar el hijo de otra persona.
Esta técnica consiste en la creación de uno o más embriones mediante fecundación in vitro en un laboratorio y su posterior implantación en el útero de la gestante.
El embrión será creado por el deseo de los futuros padres. Por ello y en la medida de lo posible, los óvulos y espermatozoides utilizados serán aportados por los padres de intención. Si esto no es posible, se utilizarán óvulos y/o espermatozoides de donantes por otras personas.
Generalmente, la única función de la gestante subrogada en este tratamiento es gestar y dar a luz al bebé de otra persona. No obstante, existían casos (actualmente en desuso) en los que la gestante era también la que aportaba su óvulo.
Decimos que actualmente eso está en desuso porque las legislaciones de muchos países impiden que la gestante y la donante de óvulos, -en caso no poder ser aportados por la madre de intención-, sea la misma persona. En aquellos países donde la legislación no es concreta en este punto, igualmente se evita esa dualidad con el fin de reducir el vínculo genético entre la gestante y el futuro bebé.
Tras el parto, el bebé será entregado a los padres intencionales, es decir, a aquella persona o pareja que manifestó su deseo de tener un hijo y así lo acordó mediante un contrato con la gestante en el que ésta renunciaba a todo derecho de maternidad sobre el bebé.
